Nuestros hogares están repletos de aparatos eléctricos, que ahora se han vuelto imprescindibles. Muchos de estos dispositivos están siempre conectados a los enchufes eléctricos y, aunque estén apagados, siguen consumiendo electricidad cuando están en stand-by. Al desconectar estos dispositivos de la corriente, puede ahorrar mucho dinero en su factura.
Las computadoras de escritorio, presentes en muchos hogares y oficinas, se encuentran entre los dispositivos que más consumen, ya que se dejan en espera durante horas, a menudo días. Un ordenador puesto en stand-by puede consumir hasta 21w/hora, mientras que encendido puede llegar a consumir hasta 80w/hora, el equivalente a 4 bombillas encendidas a lo largo del día.
Las videoconsolas, que divierten pero no tanto a los niños, pueden consumir menos hasta 23w/hora encendidas. Siempre es una buena idea apagarlos y desenchufarlos.
Los equipos de música, a los que solemos conectar el teléfono para escuchar música, se encuentran entre los dispositivos que menos se apagan. Sin embargo, pueden consumir hasta 14,4w/hora.
Las computadoras portátiles se apagan por completo muy pocas veces. De hecho, hay una tendencia a cerrar la pantalla configurando así el modo de espera, durante el cual el dispositivo consume unos 15w/hora.
Los teléfonos inalámbricos, muy populares en los últimos años, consumen unos 2,9w/hora.
Los microondas se encuentran entre los electrodomésticos que más consumen. Si dejas la puerta abierta puede llegar a consumir hasta 25w/hora.
Incluso los televisores modernos tienen un estado de espera, durante el cual una pequeña luz LED se mantiene encendida constantemente. Un televisor en modo stand-by puede consumir de 1 a 3w/hora.
El cargador del móvil es un elemento fundamental, y solemos dejarlo conectado todo el tiempo. Sin embargo, pocas personas saben que incluso cuando el teléfono no está conectado, el cargador consume energía.
Los decodificadores de TV prácticamente nunca se apagan. Sin embargo, se encuentran entre los dispositivos de entretenimiento que consumen más energía cuando están inactivos.
Incluso algunas cafeteras electrónicas rara vez se apagan, aunque se usen algunas veces al día: pueden consumir hasta 1w/hora.
