La cocina es probablemente el lugar más concurrido de la casa. Pasamos mucho tiempo allí todos los días: ya sea preparando buenas comidas, cenando con la familia o repostando en la nevera. No es de extrañar que esta pieza se ensucie muy rápidamente, lo que requiere una limpieza constante y cuidada. Sin embargo, si estamos acostumbrados a fregar el suelo, desinfectar la estufa, limpiar el horno o tirar la basura, tendemos a descuidar el mantenimiento de un electrodoméstico muy particular. ¡Y pensar que lo usamos casi todos los días y que incluso es probablemente uno de los elementos más sucios de la cocina! ¿Adivina que es?

Al final del día, cuando limpias la cocina, piensas en todo… o casi. El vals de esponjas y trapos es hermoso de ver: los platos relucen, la estufa se desinfecta, el mostrador emana limpieza, el piso brilla y hasta la habitación desprende un delicado olor a frescor. Pero, ¿estás seguro de que no has olvidado nada? Este dispositivo, en la esquina, casi creerías que ha estado solo durante semanas. Sí, de hecho es el horno de microondas   que olvidamos con demasiada frecuencia, cuando lo usamos casi a diario. Ciertamente, nos hubiera gustado que fuera autolimpiante, pero lamentablemente no lo es. Lo peor es que al recalentar todos los días la vajilla en él, al abrirlo notas que no huele muy bien y que tiene restos de comida incrustados. Pero, ¿a qué esperas para limpiarlo? Este es el error común que muchas personas cometen. Y por eso tiene la reputación de ser el electrodoméstico menos higiénico de la cocina. Sabiendo que es un nido de gérmenes y bacterias, podría ser hora de adquirir el hábito de desinfectarlo regularmente. Estos son algunos consejos para mantener correctamente su horno de microondas.

El electrodoméstico más sucio de la cocina no es otro que el microondas

limpiar una cocina

Es imprescindible en todas las cocinas y muy a menudo incluso en las oficinas. El horno microondas es un aparato sumamente práctico y versátil que nos permite calentar nuestros platos, descongelar alimentos e incluso cocinar determinadas recetas. Lo pedimos casi todos los días: temporizador encendido, simplemente coloque el plato y espere a que suene la campanita para ir rápidamente a la mesa. Su practicidad se ha vuelto tan común que casi olvidamos que también requiere un mantenimiento frecuente y cuidadoso. Aunque solo sea para mantenerlo higiénico, libre de suciedad y gérmenes.

Sin embargo, debe reconocerse que la mayoría de las personas no tienen el reflejo de limpiarlo sistemáticamente después de cada uso. Es cierto que puede parecer tedioso tener que desinfectarlo a diario, pero por tu seguridad, deberías empezar a hacerlo un hábito.

De hecho, un estudio realizado por Kimberly-Clark encontró que el 48 % de los pomos de las puertas de microondas tenían un nivel de trifosfato de adenosina (ATP) de 300 o más. El medidor de ATP es una herramienta que se utiliza para medir la suciedad de una superficie: una lectura superior a 300 significa que hay un alto nivel de patógenos que podrían presentar un riesgo de transmisión de enfermedades graves. En general, cualquier lectura por encima de 100 ya se considera poco saludable. Por lo tanto, se recomienda encarecidamente una buena  limpieza .

Investigaciones anteriores también han encontrado que el interior de los microondas está aún más sucio. Las pruebas revelaron así la presencia de bacterias peligrosas como E. coli. ”  Lo usamos para cocinar nuestra comida, pero también lo usamos para descongelar la carne “, dijo el Dr. Torruellas-Garcia, quien realizó las pruebas en el laboratorio de microbiología de la Universidad Nova Southeastern. “  Las carnes crudas contienen bacterias como e-coli y salmonella. A veces la comida salpica alrededor del microondas y no siempre lo limpiamos.  »

¿Cómo limpiar el horno microondas con trucos naturales?

limpiar un microondas

  • Con agua y limón

El remedio ideal para limpiar el interior del horno microondas es una solución de agua con jugo de limón. Este último es muy útil para eliminar perfectamente la suciedad, desinfectar toda la zona, pero también para neutralizar los malos olores.

Antes de comenzar a lavar manualmente el interior del horno de microondas, prepare una solución de agua con jugo de limón en un recipiente (también puede agregarle rodajas de cítricos). Coloque el plato en el microondas. Cierra la puerta y pon el aparato a máxima potencia durante unos 5 minutos.

El agua en el recipiente comenzará a hervir, liberando una gran cantidad de vapor. Deje el bol dentro unos minutos más mientras el aparato está apagado. El vapor ablandará la suciedad y los restos de comida seca, mientras llena el espacio con un agradable aroma a limón.

  • con bicarbonato de sodio

Después de retirar el recipiente con agua y limón del microondas, sumerja un paño limpio en la solución y limpie bien el interior del aparato.

Si algunas manchas son realmente persistentes, restriégalas con una esponja para platos espolvoreada con  bicarbonato   de sodio, un poderoso polvo blanco que también te ayudará a desinfectar el electrodoméstico y desodorizar el interior. Luego, repita el paso anterior nuevamente y limpie con cuidado.

Ahí lo tienes, no fue tan complicado: tu horno microondas destila limpieza. Está operativo de nuevo y listo para usar. Recuerda usar este método regularmente para mantener tu dispositivo siempre saludable e higiénico.